Sobre Manteros, Holgazanes y Demagogos

19 12 2011

He escuchado en repetidas oportunidades la frase «el que no quiera trabajar, que no coma», pero nunca con tanta frecuencia como en estos días. La aplicación de esta máxima, apartada del contexto en la cual originalmente estaba ubicada, ha derivado en un sin fin de especulaciones, puntos de vista y opiniones personales de la mas amplia variedad y siempre según quien la pronuncie y donde se ubique en el espectro ideológico y religioso. Por esto mismo podemos encontrarnos con defensores y detractores de estas mismas ideologías.

Pero sea cual fuere nuestra posición, los hechos que nos tocan vivir, ajenos a opiniones personales y coyunturales, son crudos, como la misma realidad.

Día a día me toca vivir el presente del conflicto con los manteros de la calle Florida en el centro porteño. Y si bien es cierto, lo digo con conocimiento de causa, de la existencia de «organizaciones manchadas» que tratan de «regular» la actividad, de presencia de venta de «sustancias naturales» y la oferta de artículos «importados», existen también familias que dependen de la entrada de ventas cercanas a lo legal. Digo «cercanas a lo legal», pues lo único que necesitan es un permiso del Gobierno para la venta ambulante, ya que lo que ofrecen puede encontrarse en cualquier mercado chino, o local de importados.

Si, ya se, no es fácil darle una solución a este tema, yo tampoco pretendo decir lo que hay que hacer, solo señalo la situación que se padece, digo que se parece, porque se parece mas a un circo, de ese que hace reír o del otro como el romano que nos hace hervir la sangre de un lado y morir desde el otro (generalmente los que están en la arena). La situación del gobierno que condena junto con los comerciantes de la calle Florida a los manteros, está sacando a relucir personajes holgazanes y demagogos.

Pero los holgazanes no tienen que ver con aquellos que se instalaron el la peatonal porteña, sino con los institucionalizados. No hace falta mencionar a algunos empleados del mismo Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que no hacen otra cosa que holgazanear en su lugar de trabajo, si dudás, visita alguna de las reparticiones y lo vas a ver con tus propios ojos, siempre hay uno, gracias a Dios no son todos, y ni hablar de aquellos que solo aparecen para firmar la asistencia y cobrar.

Pero la holgazanería y la demagogia no es solo propia del Gobierno de la Ciudad, El Estado Nacional, creo que le gana pro varios cuerpos. Solo voy a darte un ejemplo. ¿Viste el anuncio de la AFIP? «exigí estar en Blanco», sabrán ellos de los miles de empleados públicos que cobran mas dela mitad de su sueldo en NEGRO? esto es DEMAGOGIA ¿o hipocresía?

Desde ambos gobiernos de habla de «profundizar el modelo», «mejorar la gestión», ambos con un segundo mandato, con nuevas e inmejorables oportunidades. No tienen excusa para no ponerse a trabajar, y para darse cuenta quienes son los que verdaderamente quieren trabajar, no ser mantenidos, ni «ilegales», sino ganarse el pan con el sudor de su frente.

Desde este lugar les recuerdo y advierto sobre el riesgo de hacer caso omiso a la voluntad popular, trabajen para la gente sino no coman del pueblo.

Paz!